Un joven palestino de 14 años de edad resultó gravemente herido durante una manifestación el viernes en la localidad cisjordana de Nabi Saleh, al norte de Ramallah. Ehab Fadel Barghouthi recibió un disparo en la cabeza con una bala de acero recubierta con goma; los médicos dijeron que la bala entró por la frente sobre el ojo derecho y penetró en su cerebro.
Barghouthi permanece en estado crÃtico en el hospital de Ramallah. Los cirujanos extrajeron la bala y predicen posibles daños en el ojo derecho y la parálisis de la mano y la pierna. Los médicos hicieron hincapié en la situación crÃtica en la que se encuentra Barghouthi, y dijeron que es demasiado pronto para determinar el alcance de su recuperación.
Nabi Saleh, un pueblo de 500 personas, ha sido escenario de manifestaciones semanales desde enero, cuando los residentes se reunieron para tener acceso a sus tierras agrÃcolas y para protestar contra la confiscación de tierras en el pueblo por el asentamiento israelà de Halamish.
Halamish, concebido en 1978, está situado en terrenos pertenecientes a los pueblos de Nabi Saleh y Deir Nizam, ambos experimentan el cotidiano acoso militar y de los colonos. Debido al Muro y al cierre de Cisjordania, un gran porcentaje de la mano de obra de Nabi Saleh ha perdido sus puestos de trabajo a través de la LÃnea Verde. Los residentes dicen que ya no se emiten la mayorÃa de los permisos para estos trabajadores. La violencia de los colonos crece, los aldeanos dicen, y también el acoso de los soldados que habitan en la base militar cerca de Nabi Saleh. A los pastores se les prohÃbe pastorear con sus rebaños y 400 olivos pertenecientes a los dos pueblos han sido destruidos. Los aldeanos informan de que los ataques de los colonos son indefectiblemente cometidos bajo la protección del ejército.
Los residentes de Nabi Saleh informan de que muchas de las tierras recientemente confiscadas contienen recursos acuÃferos – pozos y fuentes – y que cuando los aldeanos visitan las zonas con agua para fines agrÃcolas o recreativos, a menudo son expulsados por los colonos.
Las fuerzas de ocupación israelÃes han impedido a los medios de comunicación y a los médicos acceder a Nabi Saleh durante las manifestaciones cerrando la entrada a la aldea. Testigos dicen que en la manifestación de este viernes, a la que asistieron aproximadamente 150 personas, los agentes de la PolicÃa de Fronteras tomaron posiciones desde el techo de una casa en las afueras de la aldea, y Barghouti se encontraba a 20 metros de la casa cuando le dispararon. De inmediato se derrumbó y fue evacuado inconsciente a Salfeet, y luego al hospital de Ramallah. Esta grave herida es otro ejemplo trágico de la polÃtica israelà de escoger a los niños para aterrorizar y reprimir a comunidades enteras. La manifestación estaba todavÃa dentro de la aldea cuando los militares israelÃes atacaron a los residentes. El niño, claramente, no representaba ninguna amenaza para nadie.
Además de Barghouthi, otras nueve personas resultaron heridas, entre ellas dos periodistas y una chica de 18 años que fue alcanzado por un proyectil de aluminio de un depósito de gas lacrimógeno.
Debido a la participación o a la mera sospecha de participación en las manifestaciones semanales, nueve residentes de los dos pueblos han sido detenidos, y cinco detenciones se produjeron sólo durante la semana pasada.