Con el fallecimiento de Nelson Mandela, Sudáfrica ha perdido un líder realmente inspirador de la lucha contra el apartheid. El mundo ha perdido a un símbolo de la búsqueda humana de la justicia y la igualdad. Palestina ha perdido a un compañero de lucha que nunca olvidó el vínculo natural entre dos pueblos que luchan contra el apartheid.
El pueblo palestino no olvidará la solidaridad que Nelson Mandela ha demostrado cuando el apartheid ya había terminado en su país. Vamos a seguir recordando su compromiso con la causa palestina, cuando declaró en la ceremonia de las Naciones Unidas del Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino: "sabemos muy bien que nuestra libertad es incompleta sin la libertad de los palestinos."
Ahora que estamos de luto por el fallecimiento de Mandela, estamos recordando no sólo sus logros personales y su visión, también seguimos su voluntad 'de ser recordado como parte de ese colectivo'. Mandela fue realmente un líder de uno de los más poderosos movimientos de liberación.
Queremos recordar los logros del movimiento, la fuerza, la determinación y el sufrimiento de la gente de Sudáfrica y su coraje para seguir trabajando por superar el legado del apartheid. Los millones de personas que día tras día se resistieron a la opresión y con esta lucha inspiraron a millones más en todo el mundo a ponerse de pie contra el apartheid en Sudáfrica y contra el racismo y la opresión colonial en todas partes. Queremos recordar el movimiento globa lcontra el apartheid que con base en la convocatoria de Sudáfrica por el boicot del apartheid ha movilizado a las personas, las organizaciones y, finalmente, los gobiernos de todo el mundo.
Mientras que un héroe único de la justicia se ha ido hoy, el espíritu de la lucha colectiva por combatir el apartheid se está re-formando lenta pero incesantemente para finalmente derrotar así el apartheid israelí. En las calles de Palestina la llama de la resistencia sigue niegando al apartheid israelí el estado de "normalidad". Una vez más los piquetes contra productos del apartheid aparecen delante de los supermercados, las asambleas de accionistas son interrumpidas por los que denuncian los negocios sucios con el apartheid e incluso en los pasillos de los gobiernos los llamados para poner fin a las complicidades están ganando voz.
Las Naciones Unidas ha declarado 2014 el Año de la Solidaridad con el Pueblo Palestino. Veinte años pasaron desde el fin del apartheid en Sudáfrica e hoy depende de todos nosotros de que el espíritu de la resistencia inquebrantable contra el apartheid sigue vivo.
Vamos a continuar la lucha contra el apartheid hasta que un día – al igual que Nelson Mandela – podamos anunciar "¡Libres al fin!"
¡Dejemos que el nuevo movimiento anti-apartheid crezca!
Amandla!