Resistencia frente al brutal racismo y la colonización
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Resistencia frente al brutal racismo y la colonización

En muchas aldeas palestinas han continuado las actividades populares contra los crímenes de guerra de la Ocupación, el Muro del Apartheid y las políticas de expulsión racista. No les queda otra opción. Los guetos transforman las ciudades palestinas y las aldeas en una pesadilla de prisiones al aire libre que ya ha tomado forma real. Mientras los ojos del mundo se fijan en los crímenes del Líbano y, de vez en cuando, de Gaza, la Ocupación está preparando los mecanismos de represión en el interior de los guetos a través de torretas de vigilancia, bases militares y puertas que convierten estos lugares en prisiones dentro de prisiones.
Cientos de manifestantes de Bilin, al oeste de Ramallah, realizaron su marcha semanal desde la mezquita hacia el Muro. Estos días las protestas en toda Palestina se hacen en contra de los crímenes sionistas, desde el Muro hasta Gaza y el Líbano. Los manifestantes llevaron las banderas de Palestina y del Líbano y tres ataúdes cubiertos con sangre, simbolizando las despiadadas masacres que la Ocupación ha perpetrado contra la población.
Las Fuerzas de Ocupación bloquearon la manifestación a la entrada de la aldea y la separaron en dos partes. Más tarde los soldados mostraron su brutalidad –manifestando su venganza sobre la población de la aldea- con porrazos, golpes con la culata de sus armas, gases, balas de goma y bombas de sonido. Uno de los activistas por la paz que apoyaba la manifestación fue alcanzado en la frente por una bala de goma y aún se encuentra en estado de coma inducido médicamente.
Al oeste de Belén, cientos de personas de Al-Khader marcharon en su manifestación semanal desde la mezquita a través de las calles de la aldea gritando consignas contra el Muro y los crímenes sionistas. Frente al Muro, representantes de las fuerzas islámicas y nacionales se dirigieron al público pidiendo la continuidad de la resistencia contra el Muro.
En Tulkarem cientos de personas marcharon desde la mezquita hacia el centro de la ciudad en protesta contra los crímenes en el Líbano. Los manifestantes se detuvieron en la Plaza de los Mártires para escuchar los discursos de los representantes de las fuerzas nacionales e islámicas.

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