Como ha sido el caso en toda Cisjordania, la aldea de Niâlin ha esta do sujeta a una creciente violencia en las últimas semanas, ya que las fuerzas de Ocupación has usado medidas extremas para negarle a los aldeanos sus derechos básicos durante la recogida de aceitunas.
***image2***El Viernes 24 de Octubre del 2008, los granjeros de Niâlin fueron atacados por las fuerzas Ocupación he impedidos de llegar a su olivares, que quedaron aislados por el Muro. Mientras continua la construcción del Muro, los buldózeres y las fuerzas de Ocupación usurpan más y más la tierra de la aldea, haciendo cada vez más difÃcil que los campesinos lleguen a sus tierras de labrantÃo. El Viernes, las fuerzas llegaron hasta la calle principal de Niâlin, y empezaron a disparar gas lacrimógeno sobre los granjeros que se estaban preparando para rezar por su tierra. Sin ningún motivo aparente, las tiendas, los mercados y aún las casas particulares fueron alcanzados por los disparos de gas lacrimógeno de las fuerzas.
A pesar del hecho de que mucha gente tenÃa dificultades respiratorias como resultado del gas lacrimógeno, los pobladores de Niâlin aún intentaron llegar hasta sus tierras para resistir la opresión de la Ocupación. La verdad es que la violencia a la que se enfrentan solo consigue hacerlos más determinados para continuar su lucha contra el castigo colectivo.
Muchos activistas por la paz tanto internacionales como israelÃes se unieron a los aldeanos en solidaridad con su lucha, y como los manifestantes se acercaron a los buldózeres y a las fuerzas de Ocupación, estas últimas comenzaron a dispararles balas de goma y más gas lacrimógeno. Los ataques obligaron a los manifestantes a retroceder hacia la aldea, pero los soldados fueron en su persecución, y una vez más dispararon gas lacrimógeno contra casas particulares y negocios. Hasta el centro medico de Niâlinâs fue objeto de ataques con gas lacrimógeno, y mientras los equipos médicos se apresuraban a ayudar a aquellos con problemas respiratorios por culpa del gas, dos personas fueron heridas con balas de goma.