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Después de la oración del viernes, los manifestantes marcharon hacia las puertas militares del muro del Apartheid llevando pancartas y gritando consignas a favor de la libertad de todos los presos palestinos, y en especial de los de Niâlin. Durante el último mes, las fuerzas de la Ocupación han detenido a 22 vecinos en las ya frecuentes incursiones nocturnas.
Esta semana, los soldados atacaron a los manifestantes antes de que llegaran a la puerta principal. Los jóvenes se enfrentaron a los soldados, los cuales no pararon de lanzar gas lacrimógeno durante toda la marcha. Las fuerzas de la Ocupación han empezado a utilizar una nueva bomba de sonido, que se caracteriza por desprender un sonido mucho más elevado que la anterior. Unas cuantas personas se vieron afectadas por la gran cantidad de gas lacrimógena que se lanzó y fueron atendidas por los voluntarios de la Media Luna Roja que habÃa en la zona. Los soldados dispararon munición real y también habÃa francotiradores.
El ejército continúo con su polÃtica de detenciones. Durante la protesta, se abrió la puerta principal del Muro y dos solados con pistolas salieron corriendo de ella hacia la multitud. Estuvieron persiguiendo a los manifestantes durante más de un kilómetro y medio y finalmente cogieron a un hombre de un pueblo vecino que habÃa asistido a la protesta para solidarizarse con el pueblo de Niâlin. Los captores le agredieron antes de llevárselo a paradero desconocido.
Más tarde intentaron capturar a dos jóvenes. De todos modos, los manifestantes les frustraron el plan cuando lanzaron gas lacrimógeno a los soldados que a su vez respondieron con fuego. Los enfrentamientos continuaron hasta última hora de la tarde pero no hubo más detenidos.