Los vecinos de Al-Masara y los activistas internacionales participaron en la protesta semanal contra el Muro del Apartheid portando banderas palestinas y coreando "Palestina Libre." Su mensaje también incluía la libertad de los prisioneros palestinos en las cárceles de la ocupación israelí.
Las fuerzas de la Ocupación no cerraron la entrada de la aldea como es habitual, si no que se escondieron tras los árboles y sorprendieron a los manifestantes a su llegada al Muro del Apartheid con bombas de gas lacrimógeno. Golpearon a los manifestantes, causándoles heridas.
Los manifestantes aseguran que seguirán la resistencia popular hasta que se consiga la Libertad de Palestina con Jerusalén como su capital.