El día 37º s de la huelga de hambre por la Dignidad y la Libertad ha sido declarado el Día de la Ira en solidaridad con los presos palestinos y en protesta contra la visita del presidente de los EE.UU. Trump a Belén. El ejército israelí asesinó a una tercera persona desde que comenzaron las protestas solidarias con los presos.
La visita de Trump fue corta, centrada solamente en un encuentro con Abu Mazen, mientras las familias de los presos palestinos en huelga de hambre estaban manifestándose en la Plaza Mangar, en Belén, donde se reunieron los presidentes. La protesta en Belén y las marchas por toda Cisjordania mostraron una vez más la desconexión entre la determinación del pueblo en las calles para continuar su lucha por la liberación y sus derechos y Trump y Abu Mazen conversando diplomáticamente dentro de habitaciones con aire acondicionado.
El 22 de Mayo del 2017 es señalado por la huelga general que tuvo lugar por toda la Palestina histórica, por primera vez desde la Primer Intifada en 1987. Esto llega el 36º día de la huelga de hambre por la libertad y la dignidad donde la situación de los presos políticos se ha vuelto crítica. El mismo día setenta presos fueron reubicados en hospitales israelíes ya que su salud estaba gravemente deteriorada. Los presos políticos palestinos continúan unidos en la huelga.
Hubo manifestaciones en todas la Cisjordania Ocupada, incluyendo el Jerusalén Ocupado, en solidaridad con los presos en huelga de hambre y exigiendo que Israel cumpla las demandas de los huelguistas. Inevitablemente, las manifestaciones fueron suprimidas violentamente por el ejército israelí. Los enfrentamientos tuvieron lugar en la ciudad de Hebron y en sus aldeas, en Beit Umar, Belén y sus distritos, en Ramallah, Nabi Saleh, Orfar Prison, Qalandiya, Nablus, y Qalqelya. Los colonos estuvieron quemando tierras agrícolas cerca de Nablus y arrojando piedras a las carreteras palestinas atacando a los conductores.
El puesto de control de Qalandiya fue testigo de los enfrentamientos más violentos con dieciocho heridos, ocho de ellos por fuego real en el estómago y las piernas y los otros diez con balas de acero recubiertas de goma. Varios manifestantes fueron tratados por inhalación de gases lacrimógenos. Una persona fue herida de gravedad con fuego real en la aldea de Nabi Saleh.
El joven palestino Raed Ahmad Radayda, de solo 15 años, fue asesinado en el puesto de control de contenedores al Nordeste de Belén. Como resultado los enfrentamientos entre los palestinos y el ejército israelí se extendieron a las aldeas de los alrededores. La Media Luna Palestina informó de que el ejército israelí impidió que las ambulancias llegaran hasta el muchacho. Raed Ahmad Radayda fue uno de los tres jóvenes palestinos que han sido asesinados en esta semana. Un total de veinticinco palestinos han sido asesinados desde el comienzo del 2017.