Además del fiero ataque israelí a Humsa, los residentes Palestinos de los barrios de Sheikh Jarrah y Al-Bustan en Jerusalén Este se enfrentan a acciones inminentes de limpieza étnica israelí. La próxima expulsión de los palestinos de allí es parte de las medidas coercitivas israelíes para vaciar Jerusalén de sus habitantes palestinos y reemplazarlos con colonos judíos ilegales.
Según ONUCAH (UN OCHA por sus siglas en ingles), en el 2021, las autoridades de ocupación israelíes han demolido 53 estructuras pertenecientes a palestinos en Jerusalén. Estas demoliciones han dado como resultado el desplazamiento de 69 personas. Algunas de las demoliciones fueron llevadas a cabo en la aldea de Silwan, donde está ubicado el barrio de Al-Bustan.
La demolición de estructuras individuales no es sino el comienzo de una demolición masiva de todo el barrio de Al-Bustan.
Comentando sobre la inminente limpieza étnica de miles de palestinos de Sheikh Jarrah y Al-Bustan, Jamal Juma’, el coordinador general de la Campaña Stop the Wall declaró:
Destruyendo estos dos barrios, las autoridades de ocupación israelíes buscan expulsar a los palestinos de la zona que rodea la Ciudad Vieja de Jerusalén.
Esto servirá a las intenciones israelíes de judaizar Jerusalén en la zona que ellos llaman ‘cuenca sagrada.’ Por sagrado, los israelitas quieren decir que la zona solo sería habitada por judíos.
Echando a los palestinos de Sheikh Jarrah y fundando allí un asentamiento ilegal, el gobierno israelí podría apretar su control sobre la Ciudad Vieja de Jerusalén a través de los asentamientos que jalonan la zona. Sin la presencia palestina en Sheikh Jarrah, pueden conectar entre sí el asentamiento ilegal de Rafat Ashkoul, la Colina Francesa y el Hotel del Pastor, que los colonos robaron a los palestinos hace algunos años.
Este esquema es parte de un plan mayor para judaizar toda la ciudad de Jerusalén y reducir a los palestinos allí a un pequeño grupo minoritario.
Sheik Jarrah: Ser Tragado por colonos codiciosos
El barrio de Sheikh Jarrah está ubicado en la montaña de Al-Masharef al Norte de la ciudad de Jerusalén, fuera de la ciudad vieja. La mayoría de sus habitantes son palestinos que fueron expulsados de sus hogares, que son parte de actual Israel, por las mafias sionistas cuando nació Israel en 1948.
En los 50, el gobierno jordano, que regía Cisjordania, incluyendo Jerusalén Este, en ese momento, otorgó partes de las tierras de Sheikh Jarrah a los refugiados palestinos. Antes de eso, esos refugiados estuvieron sin hogar durante años, viviendo en garages para autobuses en Jerusalén.
A través del apoyo financier de la Agencia de las Naciones Unidas para la Ayuda y el Trabajo a los Refugiados Palestinos (UNTRWA por sus siglas en inglés), el gobierno Jordano construyó casas para esos refugiados. Pocos años después, Jordania reconoció la propiedad de los refugiados palestinos allí.
En 1972, El Comité Comunitario Sefardí y el Comité Knesset Yisrael, dos organizaciones colonas fanáticas, comenzaron a librar una guerra contra los palestinos que vivían en Sheikh Jarrah. Las dos organizaciones, respaldadas totalmente por el gobierno israelí, fabricaron documentos reclamando que las 28 familias palestinas en Sheikh Jarrah vivían allí ilegalmente. Habían apuntalados sus mentiras diciendo que los derechos de los colonos judíos sobre Sheikh Jarrah databan de 1885. Esto contradice los archivos otomanos, en los que se prueba que los derechos de los palestinos a la tierra e Sheikh Jarrah están preservados. De hecho, la tierra de Sheikh Jarrah pertenece a los palestinos desde mucho antes de 1885.
Desde entonces, los palestinos allí han estado batallando con el sistema legal racista israelí para frustrar los intentos de los colonos para apoderarse de sus hogares. El Juzgado de Paz Israelí en Jerusalén ha ignorado la propiedad documentada palestina de sus hogares. En lugar de eso, el tribunal se ha basado en los documentos falsos presentados al tribunal por las organizaciones colonas para rechazar las apelaciones de los dueños palestinos.
Un residente palestino de Sheikh Jarrah cerca de un muro donde se lee en árabe “No nos vamos.”
El sistema legal racista israelí facilita la limpieza étnica de los palestinos y los tribunales han rechazado los casos bien documentados presentados por los palestinos. Por décadas, el tribunal ha estado emitiendo órdenes para expulsar a los palestinos de sus hogares. Hasta ahora, las dos organizaciones colonas han robado por la fuerza los hogares de doce familias palestinas.
Las familias que quedan se enfrentan ahora a la expulsión inminente después que los tribunales israelíes rechazaran sus apelaciones. Por encima de esto, el tribunal israelí ha emitido órdenes obligando a esas familias palestinas a pagar unos 70, 000 ILS (20, 000 $). El dinero irá a los abogados de los colonos que llevan los casos contra los palestinos para limoarlos étnicamente.
Al-Bustan: Bajo la misericordia de los inmisericordes colonizadores
El barrio de Al-Bustan está ubicado a 300 metros de la parte Sur del muro que rodea la mezquita Al-Aqsa. Está habitado por unos 1.550 palestinos, el 63% de ellos son niños menores de 18 años.
Al igual que en Sheikh Jarrah, las autoridades de ocupación israelíes buscan limpiar étnicamente los 1.550 habitantes palestinos de Al-Bustan. Las 90 casas que han resistido hasta ahora la política de demolición israelí allí se enfrentan a una demolición masiva inminente.
El Ayuntamiento de Jerusalén ha rechazado recientemente todos los planes urbanísticos que han sido solicitados por los residentes de Al-Bustan para presentar como parte del proceso para obtener los permisos de construcción. El tribunal israelí rechazó las apelaciones hechas por los propietarios palestinos, que ahora se enfrentan a la amenaza directa de demolición de sus hogares.
Sobre las ruinas de los hogares palestinos, las autoridades de ocupación planean edificar un jardín bíblico llamado ‘el Jardín del Rey David.’
Desde el 2004, los palestinos en el barrio de Al-Bustan se han estado enfrentando a las prácticas brutales de limpieza étnica israelíes. Las autoridades de ocupación israelíes han estado desde entonces intentando demoler los 100 hogares del barrio. Inicialmente, las autoridades de ocupación israelíes redujeron a escombros diez casas en el 2005. La demolición de las otras 90 casas del barrio fue frustrada gracias a la resistencia popular y a la presión sobre el gobierno israelí para detener esta campaña de limpieza étnica masiva.
Aún así, la ocupación israelí nunca se ha rendido en sus planes de limpiar étnicamente a los palestinos de sus hogares. Una herramienta usada por Israel para obligar a los palestinos a salir de la zona es rechazar cualquier solicitud de permisos de construcción que hagan los palestinos. Esto les permite entonces demoler sus edificaciones con el pretexto de “falta de permiso de edificación”.
El Ayuntamiento de Jerusalén también ha intentado reubicar a los residentes de Al-Bustan en Beit Hanina, otra zona en Jerusalén habitada por palestinos. Sin embargo, los residentes rechazan la proposición y continuan viviendo firmes en sus hogares.
No te quedes pasivo frente a los crímenes de guerra israelí!
Cada día, los habitantes de los barrios de Al-Bustan y Sheikh Jarrah se enfrentan a la batalla con un sistema feroz e inhumano colonialista y de apartheid israelí para seguir su existencia en sus hogares.
Comparten su batalla con las comunidades beduinas palestinas en el Valle del Jordán, como Humsa, y comunidades beduinas en la vecindad de Jerusalén.
Llamamos a la comunidad internacional, a sus gobiernos y a la sociedad civil, a asegurar la justicia y la responsabilidad.
Reiteramos nuestro llamamiento a la comunidad internacional para:
- reconocer y denunciar las políticas israelíes contra todo el pueblo palestino, incluyendo la limpieza étnica inminente de Sheikh Jarrah, Al-Bustan y las comunidades beduinas y las demoliciones actuales de Humsa al Fawqa, como crímenes de guerra de un Poder Ocupante, la violación del derecho palestino a la autodeterminación lo que constituye del delito de apartheid.
- crear un Consejo de Derechos Humanos independiente con la misión de investigar los hechos del régimen de apartheid israelí y las obligaciones asociadas de los estados, las organizaciones internacionales y las empresas comerciales.
- promover el desarrollo de una manera transparente de una base de datos en las NU sobre las empresas comerciales involucradas en los negocios de los asentamientos ilegales israelíes.
- Ratificar la campaña online para salvar Sheikh Jarrah, Al-Bustan y Humsa compartiendo las noticias diarias y actualizándolas en esas zonas usando el hashtags: #SaveSheikhJarrah #SaveAlBustan and #SaveHumsa.
Urgimos a la comunidad internacional a imponer sanciones centradas en lo económico y lo militar sobre Israel, para apoyar públicamente y cooperar plenamente con la Oficina del Fiscal del Tribunal Penal Internacional y hacer que los individuos, incluyendo los actores corporativos sean responsables como cómplices criminales de la limpieza étnica de palestinos en la Cisjordania Ocupada.