“Que voy a hacer si doy a luz mientras estoy lejos de ustedes? Como voy a pasar esta experiencia mientras estoy en prisión y sola.” Este mensaje fue expresado por la presa palestina embarazada Anhar Deek, de 25 años; en una carta que envió a su familia mientras se aproxima la fecha del nacimiento de su segundo hijo.
En la carta, Anhar se dirige a la comunidad internacional suplicando la liberen de la cárcel diciendo, “Imploro a todas las personas con conciencia a hablar y pedir mi libertad.”
Hablando sobre las condiciones terrible de las cárceles israelíes que serán perjudiciales para su salud y la de su bebé, Anhar agrega,
“La cárcel no está preparada n para dar a luz ni para criar un niño por quer lkas condiciones aquí son increíblemente pobres… Como será para un niño nacer y ser criado aquí si nosotros los adultos tenemos miedo? Por mi embarazo estoy sufriendo tristeza y cansancio, y mi cama ni siquiera es adecuada para dormir.“
Anhar es de la aldea de Kufr Ni’ma, en el distrito de Ramallah. Las fuerzas de ocupación israelíes la arrestaron el 8 de Marzo del 2021 cerca del Monte Al-Raysan, donde había una protesta pacífica contra la incautación iosraelí de tierras palestinas en la zona.
Aunque estaba embarazada en el momento de su detención, las fuerzas de ocupación israelíes maltrataron brutalmente a Anhar dejándole moretones en su cara.
Desde entonces, Anhar ha estado en custodia sin juicio y se le ha denegado el ver a su famila, a la que extraña, especialmente a su hija de veinte meses Julia, como expresa en su última carta:
“Extraño mucho a Julia. Mi corazón me duele por ella; Ojalá pueda abrazarla y estrecharla cerca de mi corazón. El dolor que siento no puede ser traducido a palabras.”
Después de dar a luz a se segunda hija, Anhar declare en la carta que los carceleros israelíes las tienen a ambas en confinamiento solitario.
La familia de Anhar ha enviado un llamamiento a grupos de derechos humanos para presionar a las autoridades de ocupación israelíes para liberar a Anhar antes del cumplimiento de su condena para que pueda tener los cuidados médicos que necesita después de haber dado a luz a su hija.
Anhar no será la primera y mientras Israel no se haga responsable de sus crímenes contra los palestinos, ni será la última en dar a luz con condiciones médicas escasas y mientras está esposada.
Junto con Anhar, hay 42 mujeres presas soportando malos tratos diariamente en las cárceles israelíes; algunas son madres anhelando estar con sus hijos, mientras otras están enfermas sufriendo diferentes problemas sanitarios. Además de las mujeres presas, hay alrededor de 4.700 presos, incluyendo 200 niños y 550 detenidos administrativos, detenidos sin juicio.
En la actualidad, hay cinco presos palestinos que han estado hacienda una huelga de hambre desde hace semanas para protestar por su detención administrativa y piden su inmediata liberación.
La ocupación israelí usa detenciones arbitrarias masivas de palestinos como una herramienta para reprimir y controlar al pueblo palestino. A través de eso Israel reprime la voluntad palestina de terminar con la larga duración de la opresión, el apartheid, la colonización de sus tierras y la dehumanización israelí.
En los últimos meses, particularmente durante y en las repercusiones del Levantamiento Unitario de Mayo, Israel ha intensificado su campaña de arresto de palestinos por los territorios bajo su control, incluyendo a los ciudadanos palestinos de Israel. En una de sus últimas invasiones con arrestos, el martes 24 de Agosto, la ocupación israelí asesinó a Imad Hashash, de 16 años, mientras irrumpieron violentamente en el Campamento de Refugiados de Balata, en Nablus para arrestar a otros palestinos.
El asesinato de Imad demuestra que los arrestos israelíes de palestinos les cuestan no solo su libertad y su dignidad sino que también la pérdida de sus vidas.