Hay muchas maneras por las cuales una campaña puede presionar sobre una organización para que retire sus inversiones de las empresas cómplices y que facilitan el sistema del apartheid.
La campaña para lograr la desinversión del Fondo de Pensión Noruego de Elbit Systems ha sido la primera desinversión de una empresa sobre la base explícita de su involucración con el Muro. La información y las apelaciones se enviaron al Consejo Ético del Fondo, cuya determinación estuvo basada en un código ético sobre que empresas deberían ser excluidas, y eso en última instancia llevó al Fondo a retirarse de Elbit.
Otro ejemplo puede ser visto en la campaña pidiendo el retiro de fondos del gigante TIAA-CREF para terminar con las inversiones en empresas que se aprovechan de la ocupación israelí. Mientras proclama su adhesión a la responsabilidad social la organización en invierte en empresas como Motorola, Elbit Systems y G4S.
Los puntos siguientes, extraídos de la experiencia de esas y otras campañas, pueden ser útiles para elegir una empresa como blanco de las desinversiones.
1. Enlazando con una campaña internacional.
Es más fácil unirse a una campaña ya establecida que comenzar una nueva, y las empresas que ya son blanco de campañas deberán ser una prioridad.
2. Descubrieno el tamaño de la inversión.
Tanto las grandes como las pequeñas inversiones tienen sus beneficios y sus desventajas. Aunque la pérdida de una gran inversión tiene la oportunidad de hacer un efecto más tangible en las políticas de la empresa, los esfuerzos para la desinversión pueden ser más dificultosos. La pérdida de pequeñas inversiones, aunque no haga una gran mella financiera, puede ser más fácil de efectuar y es muy efectiva para llamar la atención sobre el BDS y creal lugar para otras campañas.
3. Evaluando la posibilidad de que un fondo dado pueda desinvertir basándose en sus directrices específicas.
En el caso de Noruega, las campañas fueron capaces de utilizar las directrices éticas del Fondo, que permitían al Consejo Ético investigar las inversiones hechas en empresas acusadas de “violaciones de principios humanitarios fundamentales, graves violaciones de los derechos humanos, corrupción generalizada o graves daños ambientales” y recomendó desinvertir. Mecanismos similares existen en otros fondos de inversión; si no los hubiera, los activistas deben ser capaces de hacer campaña para la incorporación de alguna clase de directrices éticas vinculantes.
4. Evaluando la posibilidad de desinversiones de una empresa en particular basada en un informe del fondo de desinversiones.
El fondo noruego había previamente desinvertido de empresas por infracciones. En total 125 empresas están excluidas actualmente, la mayoría por su involucración en la producción de varios tipos de armas, y varias más por destrucción del medio ambiente o por violaciones a los derechos laborales. Otros fondos de inversión pueden tener historias similares, y pueden ser precedentes importantes en los que basarse y también para calibrar la posibilidad del éxito.
5. Ganando el apoyo de los accionistas.
Para el Fondo de Pensiones Noruego, siendo todo su accionariado noruego, la sociedad civil y los partidos políticos fueron clave presionando para la desinversión. Si las inversiones en entredicho pertenecen a una iglesia, un sindicato o una universidad, le empresa en la mira tendría que estar comprometida en actividades a las que los accionistas se opondrían a gusto y se puede ir contra ella.
6. Usando mecanismos legales.
La ley internacional y los derechos humanos pueden ser herramientas muy útiles para campañas de desinversion, tanto con inversiones estatales y gubernamentales y fondos de pensión como contra empresas privadas. El Muro está siendo construido desafiando la ley internacional y a ley humanitaria, e ignorando la decisión del Tribunal Penal Internacional (ICJ por sus siglas en inglés) del 2004. Por lo tanto, las empresas en los países que incorporan la ley internacional a su sistema legal nacional pueden ser juzgadas en tribunales nacionales. Por ejemplo, Veolia y Alstom, dos multinacionales francesas están en juicio en los tribunales franceses por violaciones de la ley internacional por su implicación en el metro ligero de los asentamientos en Jerusalén.